La mejor vista la tuve desde la ventana de 4to. 3ra. Estaba en el primer piso, justo donde el volumen de la esquina de Ayacucho avanza sobre la Av. Córdoba.
Años mas tarde me enteraría que ese adelantamiento termina de dar unidad al edificio de la escuela, siguiendo -como el Palacio- las reglas académicas dictadas por la Ecole des Beaux Arts.
Yo pensaba que era para poder ver mejor esos detalles que me hipnotizaban.
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